02 DE SETIEMBRE DE 2013
LOS LECTORES OPINAN
/ ABC Color
Responsabilidad fiscal
Está en discusión un proyecto de ley muy importante para el ordenamiento de las finanzas públicas que es la responsabilidad fiscal, para posibilitar una buena gestión del poder administrador. Es tiempo de dejar de boicotear al gobierno de turno, el pueblo paraguayo ya no puede perder otro cinco años postergando sus ansias profundas de progreso y justicia social. No interesa quién lo hace: colorado o liberal, socialista u otra denominación.
Los partidos tienen la obligación de llevar a cabo sus promesas electorales y la oposición tiene la obligación ética de apoyarlos. Las elecciones legitiman su propuesta, sobre todo con respecto al presupuesto general de la acción, en donde en realidad se hace visible el proyecto de gobierno.
La idea de contexto la maneja el poder administrador, sobre todo en el tema económico presupuestario. El Congreso tiene un poder de contralor y de supervisión de la gestión administrativa, pero las herramientas, los técnicos, ni los intereses de generar un presupuesto coherente. El Congreso tiene visiones parciales conforme a su propia integración.
En el tema presupuestario es necesario cierto orden y gerenciamiento técnico. Para eso necesitamos reglamentar la Constitución sobre la facultad que tiene el Congreso de modificar el proyecto presupuestario. Debemos adecuarnos a la realidad, los que manejan los datos técnicos sobre las posibilidades tributarias o de recursos es el Poder Ejecutivo. La inclusión en la ley de la necesidad vinculante del dictamen del Ministerio de Hacienda para poder aumentar los recursos presupuestarios es solo incorporar un poco de racionalidad y consenso.
El manejo de la realidad económica y posibilidades reales lo tienen organismos del poder administrador, incluido el Banco Central. Si se quiere modificar las partidas de gasto público deben tenerse los recursos. Crear consenso entre ambos poderes es más legítimo. ¿De qué sirve aprobar un presupuesto que no es realista y no podrá llevarse a cabo?
La limitación en cuanto al déficit fiscal y otras cuestiones no es necesaria ni conveniente. No se puede limitar la política económica que a veces trae necesidades coyunturales diversas, inclusive a veces el déficit es una política utilizada y declarar como mal desempeño de funciones los resultados macroeconómicos no es bueno para la estabilidad política ni económica.
Luis A. Traversi
